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martes, 25 de septiembre de 2012

El guecko y la polilla

Esta es la historia de cómo una polilla fue atrapada por un guecko.
Estaban los dos librado una lucha del mas fuerte o es probable que una lucha de estrategia, donde no el mas fuerte es el que siempre gana si no el mas persistente o el mas audaz.
Los vi en la pared de la puerta que da  a la cocina, la polilla hacía un ligero sonido por que batía sus alas a mas no poder y el guecko hacía un movimiento como que retrocedía y con sus patitas y ventosas se aferraba a la pared queriendo evitar que su presa, la polilla, se le escapara.
El guecko no era de gran tamaño, mas bien era de un tamaño regular, a simple vista parecía que la polilla podía ser un poco mas grande o mas rápida, lo cual me llamó la atención, por que ¿cómo es posible que pudiendo la polilla volar y ser mas rápida (en apariencia) el guecko pudo atraparla?
El guecko poco a poco fue retrocediendo hasta llevar a la polilla hasta el borde del techo, la polilla por lo visto estaba cansándose por que aleteaba por intervalos nada mas, eso sí, cuando lo hacía dejaba todas las fuerzas que tenía, pero el guecko pudo retenerla hasta arrastrarla a lo que creo que es su cueva.
Pude perderme en ese "pequeño" espectáculo de la naturaleza, en donde fui testigo que no es el mas grande, ni el mas veloz el que gana, si no el mas inteligente, precavido y el que da un paso a la vez.
Aunque los demás tengan alas, todos podemos avanzar quizá mas rápido que esos que vuelan, si esa combinación de pasos es la justa.


sábado, 22 de septiembre de 2012

Ajena

Ajena.

Ajena, no por no ser mía sino por sentirme suya.
Ajena por sentir el olor de otra piel sobre mi.
Ajena por mirar a través de sus ojos diáfanos.
Ajena por renunciar a mi soledad y abandonarme sin pudor en su saciedad. 
Una no es más propia como cuando se siente tan el amor de alguien.
Yo creí ser mía, creí correr cuando había escampado.
Hasta que me vi tan suya
Tan de sus manos, tan de su boca, tan de su sexo.
Que no concibo ya como pude antes ser mía, sin encontrarle.